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Agradecimiento especial a Carlos Andrés Flores Domínguez
Inhala... 3... 2... 1... exhala... 3... 2... 1...
¿Recuerdas la última vez que respiraste así? La respiración es algo tan automático que muchas veces no le prestamos atención, a veces tanto que no nos percatamos de estarlo haciendo (ya volviste a inhalar, ¿verdad?).
Pero, ¿qué pasa cuando nos concentramos en ella? ¿Cuando la observamos atentamente y vemos cómo naturalmente fluye hacia dentro y fuera de nuestro cuerpo? Quizá te hayas fletado a hacerlo (probablemente en una meditación), y es una sensación muy calmante, donde tu consciencia está muy estimulada y puedes sentir tu cuerpo en un nivel muy único.
De lo que te quiero hablar hoy es acerca de la meditación, especialmente de qué ideas se tienen acerca de ella, qué es realmente, y para qué sirve. Para lograr esto, recurrí a mi amigo Carlos Andrés Flores Domínguez (tqm), quien es profesor certificado de Mindfulness en nivel profesional (CMT-P, por sus siglas en inglich), cuenta con un diplomado en formación de Mindfulness por el IMM (ojo, no es el IMSS), y es líder global de Mindfulness en Softtek. O sea, es la mera cremallera el pelado este. En esta ocasión, lo expresado por Carlos está alineado con su orientación al Mindfulness. (Pueden seguirlo en su cuenta de Instagram y Twitter @charlieaflores)
En cuanto a qué ideas se tienen, que generalmente son muy erróneas, la que destaca es aquella que involucra retirarte a una montaña en donde puedas reconectar con la naturaleza y la esencial primal del ser humano, mediante la alineación de los chakras y la entrada al Nirvana. Hay otras ideas que pueden ser cosas como "tienes que tener la mente en blanco"; "tienes que hablar sánscrito"; "necesitas adorar a alguna deidad"; cualquier otra que tú conozcas y suene a que necesitas estudiar algo.
No es así, tranqui. Realmente es mucho más sencillo, ya que, nos comenta Carlos, "la meditación es un momento deliberado que tú le dedicas a algo en específico". Esto es, donde tengas tu atención plena enfocada en algo, estás meditando. Así de fácil. Claro que la manera más "común" (léase conocida) es sentarte y concentrarte en tu respiración, pero ahora puedes tener la seguridad de que si estás con la concentración al 100 en algo que estás haciendo, ¡felicidades!, estás meditando.
Entonces, ¿no tengo que pensar en nada?
"En promedio, el periodo de atención de un ser humano dura 7 segundos", nos dice Carlos, "el de un pez dorado dura 8". Prácticamente, tenemos una condena para perder la atención y pensar en demasiadas cosas distintas. Sin embargo, aquí mismo reside la clave de la meditación (haciendo referencia a la respiración consciente), puesto que se basa en el ciclo de la atención. "Este ciclo consiste en 4 fases: Atención sostenida; Distracción; Conscientización de la distracción; Regreso a la atención. La repetición de este ciclo es la meditación Mindfulness".
En la mayoría de las ocasiones, "la atención sostenida se enfoca en la respiración, pero hay muchos tipos de meditación: puedes enfocarte en tus sentimientos, en una visualización, en alguna intención, y muchas otras. Lo importante es que tengas un canal de enfoque para poder cumplir este ciclo". Con base en esto que dice Carlos, no pensar en nada y/o tener la mente en blanco, para el caso de la meditación, no se puede. "Si se pudiera, significaría que estás en control de todos tus pensamientos, consciente, subconsciente, e inconsciente. Además, los pensamientos llegan a ti aunque no lo quieras". Y sí. Si te digo que no pienses en una barra de pan, ¿cuánto tiempo te tardaste en pensar en eso?
Bueno, Werito, ya sé qué es, ya sé que NO es, pero, ¿cómo empiezo?
Recuerda que nadie aquí está en un monasterio y que no nos dedicamos a eso, por lo que "puedes comenzar con una pequeña meditación de 5 minutos. Hay muchas apps que te permiten poner un temporizador y te marcan cuando hayas terminado (Headspace, Calm, Oak son algunas). Usa alguna de ellas si crees que no sabes cómo empezar". (Yo, Francisco, comencé con este video, que te recomiendo muchísimo.) "Cuando tengas un poco más de experiencia", continúa Carlos, "puedes ir escalando la duración de tu meditación. Se recomienda que al menos le dediques 10 minutos al día".
Si dejas de leer este mugroso blog para ponerte a meditar, te darás cuenta de que "tus niveles de estrés serán más bajos, tu rendimiento académico y productividad subirán, serás una persona más empática, puedes bajar de peso porque comes conscientemente, tus relaciones interpersonales serán más fuertes, y muchas otras cosas". Ojo, no lo dice Carlos, lo dice la ciencia.
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